El sector de la construcción contribuye de forma significativa a las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero (GEI). Representa aproximadamente el 40% de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) relacionadas con la energía y el 11% de las emisiones totales de GEI en todo el mundo. Las emisiones se deben a la energía utilizada para extraer, producir, transportar e instalar materiales de construcción, así como a la energía utilizada para el funcionamiento de los edificios. Se prevé que el sector de la construcción siga creciendo, sobre todo en los países en desarrollo, lo que aumentará las emisiones de GEI. Por lo tanto, reducir las emisiones del sector de la construcción es crucial para mitigar el cambio climático y alcanzar los objetivos climáticos mundiales.
Los materiales de construcción sostenibles basados en el cáñamo pueden contribuir significativamente a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) del sector de la construcción. Sustituyendo materiales que emiten carbono positivo, como el hormigón, el acero, el ladrillo y los materiales aislantes, por materiales a base de cáñamo que emiten carbono negativo, como el hormigón de cáñamo y el aislamiento de lana de cáñamo, se pueden reducir las emisiones a lo largo de todo el ciclo de vida de un edificio. Los materiales a base de cáñamo pueden secuestrar dióxido de carbono durante su fase de crecimiento y almacenarlo durante toda su vida útil como materiales de construcción. Además, el cultivo del cáñamo no requiere herbicidas, es robusto y necesita menos agua, lo que lo convierte en un cultivo respetuoso con el medio ambiente que puede beneficiar la salud del suelo y la biodiversidad. Promoviendo y apoyando el uso de materiales de construcción basados en el cáñamo, podemos reducir la huella de carbono del sector de la construcción y contribuir a mitigar los efectos del cambio climático.
“Creemos que el precio de los materiales de construcción debe reflejar su impacto en el medio ambiente. Los materiales de construcción carbono-positivos deberían ser más caros que los carbono-negativos, para incentivar el uso de opciones más sostenibles. Trabajaremos para conseguirlo abogando por políticas que exijan a los fabricantes de materiales carbono-positivos compensar sus emisiones, al tiempo que apoyamos el desarrollo de créditos de carbono para los fabricantes de materiales carbono-negativos, permitiéndoles vender créditos y crear unas condiciones más equitativas.”
“Nuestro enfoque se basa en los principios de transparencia, responsabilidad y colaboración. Trabajaremos con las partes interesadas de toda la cadena de valor para garantizar que nuestros esfuerzos estén alineados y sean eficaces. También aprovecharemos nuestra experiencia y nuestras redes para dar a conocer las ventajas de los materiales de construcción basados en el cáñamo e impulsar la demanda de prácticas de construcción sostenibles.”